TERÀPIA A L’ABAST
M’alegra anunciar-vos que, Teràpia a l’Abast, el projecte per treballar amb gent sense recursos ja està funcionant. Ha estat cuinat a foc lent, amb calma i cura gràcies a la participació d’alguns/es alumnes i ex-alumnes d l’Escola del Taller de Gestalt de Barcelona i d’altres terapeutes propers.
Que funcioni no és gens estrany; el nombre d persones sense recursos i amb necessitat d treball terapèutic és molt alt. Contribuir a cobrir-la ens satisfà. Ens agrada el ritme calmat i el treball a fons amb el que l’hi hem anat donat forma, i estem oberts/es a seguir modelant-la.
Ara fem un pas important penjant la nostre web.
http://www.terapialabast.com/
Si t’interessa saber més del nostre funcionament entra-hi, és senzilla.
Si necessites més informació, dins la web et permet fer preguntes i comentaris.
Si t’interessa, t’hi esperem!
Cristina Nadal, actual presidenta de T’A
Poesía y Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC)
En el Youtube que viene a continuación aparece el poeta Neil Hilnborn. La grabación corresponde a un recital de poesía, en el cual lee un poema suyo. Es un poema de amor. Impresiona su pasión, su actitud. Su determinación al mostrar un pedazo de sus vivencias. Los diversos giros de los versos destilan amor y dolor casi a partes iguales. Neil Hilborn es poeta y sufre un TOC.
La característica principal del Trastorno Obsesivo Compulsivo -TOC- consiste en la presencia de pensamientos obsesivos y actos compulsivos recurrentes. En lo que se refiere a los pensamientos obsesivos, se trata de ideas, o imágenes así como impulsos mentales que invaden la actividad cognitiva de la persona. Las compulsiones, a su vez, son actos o rituales que, de forma estereotipada, se repiten una y otra vez. Se trata, pues, de un trastorno que contiene un factor cognitivo, las obsesiones; y un factor conductual, las compulsiones.
Las obsesiones acostumbran a ser siempre desagradables, viviéndose como propias a pesar de ser involuntarias. Las compulsiones son el motor y la consecuencia de las ideas obsesivas.
Es un trastorno mucho más extendido de lo que se supone (se calcula que en España hay en la actualidad alrededor de un millón de afectados). Pero, como pasa en otros tantos trastornos de origen mental, se habla poco del mismo. Esta cuestión puede generar un malestar añadido, puesto que a la persona afectada se le suma al sufrimiento intrínseco que implica la enfermedad en sí, la idea de ser un bicho raro. Este hecho puede propiciar el ocultamiento de la misma, pudiendo generar una sensación de soledad desoladora, así como la dificultad de pedir ayuda profesional.